Avisos/Mensajes


Las Siete Iglesias del Apocalipsis

"El que tiene oído, oiga"

El Apocalipsis es , tal vez, el Libro de la Biblia más mencionado y menos leído. Y es natural porque es un Libro complejo para entender y para proyectar en la vida del mundo y en nuestra propia vida.

En su capítulo 2 presenta los Mensajes, de parte de Dios, a cada una de las Iglesias más conocidas en su tiempo y en Asia. Pensemos que este Libro se escribió hacia el año 90 d.C.

Suele entenderse que es un mensaje/aviso para ellas, para sus "ángeles" o autoridad principal, en que le menciona  las características de cada Iglesia, sus fortalezas y debilidades, y les da un mensaje para agradar al Señor.

Nosotros, cristianos de hoy, también podemos vernos reflejados en cada una de esas Iglesias, nuestras vidas personales pueden tener y tienen un paralelo con cada una de ellas, y el Señor nos invita a reconocerlo y a corregir nuestro rumbo personal.

Existen muchos estudios amplios y detallados sobre estas Iglesias y el mensaje dado a cada una. Solamente vamos a ofrecer nuestro análisis, pequeño y práctico, pensando en nuestra conversión, para hoy. Lo vamos a mirar con ojos de creyentes, no de entendidos historiadores, ni pensando que se refiere a "lo que ya fue" en la historia general de la Iglesia.



FORMATO DE LOS MENSAJES. (Tomado de Wikipedia)
Las cartas siguen un patrón común : *El Señor primero se dirige a cada Iglesia y se identifica, y define lo que sabe acerca de la Iglesia en cuestión 
*Después de esto se da un reto o reproche, seguido de una promesa.
*En los siete casos se incluye la advertencia: "El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias", aunque a veces esto viene antes que la promesa y a veces después.
*Aunque las cartas se diferencian en la longitud de acuerdo con las necesidades de cada comunidad, todas concluyen con un llamado a retener y para escuchar lo que el Espíritu dice a las Iglesias.
 *A cada Iglesia se le promete que todos los que venzan serán recompensados por Cristo.

Iglesia de Éfeso.

"Yo conozco tus obras, y tu arduo trabajo y paciencia; y que no puedes soportar a los malos, y has probado a los que se dicen ser apóstoles, y no los son, y los has hallado mentirosos; y has sufrido, y has tenido paciencia, y has trabajado arduamente por amor de mi nombre, y no has desmayado. Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor. Recuerda, por tanto, de dónde has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues si no, vendré pronto a ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido. Pero tienes esto, que aborreces las obras de los nicolaítas, las cuales yo también aborrezco. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, le daré a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios." Ap 2, 1-7

Iglesia laboriosa. Iglesia fuerte y perseverante. Iglesia que sabe discernir el bien del mal y no se deja arrastrar por lo falso. Iglesia que distingue a los lobos y los llama por su nombre, (al parecer eso de "hermanos todos" es poético pero no cierto ni saludable para la Fe, a los ojos del Señor). La caridad no es enemiga de la verdad.

Pero, tal vez como tú o yo, "ha dejado su primer amor". Hacemos lo que merece la alabanza del Señor pero hemos dejado de darle a Dios la prioridad ¿en nuestras acciones cotidianas, sobre nuestros amores terrenos?  O hemos perdido la devoción primera, la ternura de cuando conocimos el Amor de Dios. ¿Somos fríos  o solo racionales con Dios?¿Cómo somos hijos para el Padre? ¿Cómo somos hermanos con el Hijo? ¿Cómo somos dóciles con el Santo Espíritu?

Nos avisa para que nos corrijamos. Nos avisa que no perdamos el amor por Dios, que no bastan las obras.  El premio será la Vida Eterna feliz.

Iglesia de Esmirna


"Y escribe al ángel de la iglesia en Esmirna: El primero y el postrero, el que estuvo muerto y vivió, dice esto: Yo conozco tus obras, y tu tribulación, y tu pobreza (pero tú eres rico), y la blasfemia de los que se dicen ser judíos, y no lo son, sino sinagoga de Satanás.

No temas en nada lo que vas a padecer. He aquí, el diablo echará a algunos de vosotros en la cárcel, para que seáis probados, y tendréis tribulación por diez días. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.

El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que venciere, no sufrirá daño de la segunda muerte". Ap 2, 8-11


Una Iglesia que también tiene obras, que sabe lo que es mantenerse en el sufrimiento. Una iglesia pobre (en lo material). Una Iglesia en la que hay "infiltrados" que aparentan ser lo que no son. Una Iglesia que va a sufrir pobreza y dolores.

Una Iglesia que, como tú o como yo, tiene que afrontar penas y problemas, que nos pueden asustar. Que podemos probar el sabor de la tribulación. Pero que no durará tanto como para que corramos el riego de ser infieles.

Nos advierte para que no caigamos. Para que nos mantengamos firmes y sepamos que el verdadero daño es perder la Vida Eterna feliz.


Iglesia de Pérgamo 

"Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: El que tiene la espada aguda de dos filos dice esto: Yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el trono de Satanás; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás. Pero tengo unas pocas cosas contra ti: que tienes ahí a los que retienen la doctrina de Balaam, que enseñaba a Balac a poner tropiezo ante los hijos de Israel, a comer de cosas sacrificadas a los ídolos, y a cometer fornicación. Y también tienes a los que retienen la doctrina de los nicolaítas, la que yo aborrezco. Por tanto, arrepiéntete; pues si no, vendré a ti pronto, y pelearé contra ellos con la espada de mi boca. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, daré a comer del maná escondido, y le daré una piedrecita blanca, y en la piedrecita escrito un nombre nuevo, el cual ninguno conoce sino aquel que lo recibe."  Ap 2, 12-17

Una Iglesia en una ciudad importante, instruida pero con un culto pagano fuerte al emperador romano.  El Señor reconoce que ha mantenido la Fe a pesar de vivir en un ambiente hostil, pagano y hasta supersticioso, que habían soportado bien la  persecución. 

Pero una Iglesia que, como tu o como yo, creyó que podía convivir con ideas y costumbres perniciosas, creyó que no hay que ser tan "estrictos", que hay que saber relacionarse sin prejuicios y adaptarse a lo que el medio presiona que se haga. Hoy serían "tolerantes y comprensivos".

Nos advierte para que nos cuidemos de hacer concesiones innecesarias, porque se comienza cediendo en las formas y se acaba cediendo en las convicciones. Sepamos que el mal es mal y el pecado es pecado.  El premio será la amistad con Dios para siempre.

Iglesia de Tiatira 
"Y escribe al ángel de la iglesia en Tiatira: El Hijo de Dios, el que tiene ojos como llama de fuego, y pies semejantes al bronce bruñido, dice esto: Yo conozco tus obras, y amor, y fe, y servicio, y tu paciencia, y que tus obras postreras son más que las primeras.
 Pero tengo unas pocas cosas contra ti: que toleras que esa mujer Jezabel, que se dice profetisa, enseñe y seduzca a mis siervos a fornicar y a comer cosas sacrificadas a los ídolos. Y le he dado tiempo para que se arrepienta, pero no quiere arrepentirse de su fornicación. He aquí, yo la arrojo en cama, y en gran tribulación a los que con ella adulteran, si no se arrepienten de las obras de ella. Y a sus hijos heriré de muerte, y todas las iglesias sabrán que yo soy el que escudriña la mente y el corazón; y os daré a cada uno según vuestras obras. Pero a vosotros y a los demás que están en Tiatira, a cuantos no tienen esa doctrina, y no han conocido lo que ellos llaman las profundidades de Satanás, yo os digo: No os impondré otra carga; pero lo que tenéis, retenedlo hasta que yo venga. 
Al que venciere y guardare mis obras hasta el fin, yo le daré autoridad sobre las naciones, y las regirá con vara de hierro, y serán quebradas como vaso de alfarero; como yo también la he recibido de mi Padre; y le daré la estrella de la mañana. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias." Ap 2, 18-29

Iglesia en una ciudad pequeña pero muy activa comercialmente. A la que no le faltaban las buenas obras, la Fe y el servicio. Y que crecía en sus virtudes. Pero ¿tal vez una Iglesia que se preocupaba más por parecer que por ser?, ¿muy dispuesta a abrirse a novedades y costumbres mundanas? Con falta de juicio crítico, porque saber juzgar es un don del Espíritu Santo, no un vicio.

Por eso una Iglesia, tal vez como tú o como yo, que estaba dispuesta a aceptar y creer a "falsos profetas", que predican  aparentemente el bien pero siembran cizaña. Cizaña comparada con la inmoralidad sexual, que es en el fondo infidelidad a Dios y a lo que enseña Dios. Dejándose llevar a convivir en aparente paz con el mal.

Nos advierte para no contentarnos con parecer, para no dejarnos arrastrar al pecado (en ninguna esfera de la vida), nos advierte que la Iglesia no puede ser mundana, nos pide arrepentirnos y cambiar de conducta. Porque a Dios no se le engaña. Y el premio será resplandecer en el reino de Dios.

La Iglesia de Sardis 

 "Escribe al ángel de la iglesia en Sardis: El que tiene los siete espíritus de Dios, y las siete estrellas, dice esto: Yo conozco tus obras, que tienes nombre de que vives, y estás muerto. Sé vigilante, y afirma las otras cosas que están para morir; porque no he hallado tus obras perfectas delante de Dios. Acuérdate, pues, de lo que has recibido y oído; y guárdalo, y arrepiéntete. Pues si no velas, vendré sobre ti como ladrón, y no sabrás a qué hora vendré sobre ti. Pero tienes unas pocas personas en Sardis que no han manchado sus vestiduras; y andarán conmigo en vestiduras blancas, porque son dignas. El que venciere será vestido de vestiduras blancas; y no borraré su nombre del libro de la vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre, y delante de sus ángeles. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias." Ap 3:1-6

Una Iglesia a la que el Señor le dice que "está muerta". Afincada en una ciudad que también había declinado materialmente. Que ha olvidado lo que escuchó y no lo vive. Aunque también contaba con cristianos dignos de ese nombre.  Una Iglesia que necesitaba revivir con la gracia de Dios.

Una Iglesia que, tal vez como tú o yo, se creía  correcta, pero viviendo solo en formalidades. Como los que se creen cristianos  porque fueron bautizados y cumplen con ciertas costumbres y ritos, pero nada más. ¿Muchas veces no nos parece que vivimos entre cristianos así? Los cristianos de nombre, los que dicen ser "cristianos pero no fanáticos".

Nos exhorta a vigilar, a arrepentirnos, a velar para no terminar sorprendidos al fin de nuestra vida. A interesarnos más en nuestra vida espiritual y a buscar ser gratos a los ojos de Dios. Eso es lo que cuenta, eso es lo que Dios espera.  Y el premio será ser puros y poder acercarnos a Dios. 

La Iglesia de Filadelfia
 "Escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia: Esto dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre y ninguno cierra, y cierra y ninguno abre: Yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar; porque aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra, y no has negado mi nombre. He aquí, yo entrego de la sinagoga de Satanás a los que se dicen ser judíos y no lo son, sino que mienten; he aquí, yo haré que vengan y se postren a tus pies, y reconozcan que yo te he amado. Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra. He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona. Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí; y escribiré sobre él el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, y mi nombre nuevo. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias." Ap 3:7-13

Una Iglesia tratando de ser fiel. Y que seguirá predicando y ayudando. Una Iglesia pobre y débil pero leal aún en medio de las dificultades. Que se mantiene fiel a la Palabra de Dios. Y Dios la alaba por ello. 

Una Iglesia que, como tú o yo, es exhortada a mantenerse en la fe, a perseverar, a cuidar los bienes espirituales que tenemos. 

Nos avisa que nos retribuirá haciéndonos fuertes y seguros (el pueblo de Filadelfia sufría constantemente de problemas por terremotos y sabía lo que era temer). Que perseverar nos asegura la cercanía al Señor ahora y eternamente.

Iglesia de Laodicea
"Y escribe al ángel de la iglesia en Laodicea: He aquí el Amén, el testigo fiel y verdadero, el principio de la creación de Dios, dice esto: Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca. Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo. Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la vergüenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para que veas. Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete. He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo. Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias." Ap 3:14-22

Una Iglesia en serios problemas. En el peor : la indiferencia ante Dios. Establecida en una ciudad rica y próspera, donde la gente  se centraba en buscar su bienestar y su placer. Una iglesia que se creía buena y se complacía en sí misma. Una Iglesia "tibia".

Una Iglesia que tal vez como tú o como yo, cree que ya hace suficiente, que en todo hay que ser "moderados", hasta en el amor a Dios, que en la vida hay otras prioridades y  hasta se puede prescindir de Dios. ¿Nos suena conocido hoy en día?

Pero el Señor les advierte que está "a punto de vomitarlos". ¿Podría haber desgracia mayor?  Les avisa que tienen que cuidar su Fe, comprometerse con la Verdad de Dios, cuidar lo espiritual y no solo lo material. Que un cristiano materialista y mundano le repugna a Dios. Que Dios espera su conversión, o le llegará  la ruina total.

............................................

La Iglesia vive en el mundo, nosotros, que somos la Iglesia, también estamos en medio del mundo.
El único sabio y bueno es Dios, pero nosotros estamos llamados a imitarlo.
Mantenerse, realmente, en la Fe, creyendo y obrando, no es fácil.
Por lo cual podemos cometer errores y caer en pecados.

Dios lo sabe todo. A él no se le engaña con apariencias.
Y nos advierte e invita -siempre- a la conversión.
Y nos espera. Pero todo tiene un final.

Todos moriremos, Dios desea que sea para nacer a la eternidad feliz .
El que no quiere oír al Espíritu Santo, perecerá definitivamente.

............................................................


AVISOS Y MENSAJES



................................................................................


SOBRE EL APOCALIPSIS



.....................................................................................

No hay comentarios: